SALA TOMADA
En un sótano ubicado entre Angamos y la Arequipa se encuentran los mejores 800 metros cuadrados dedicados al arte contemporáneo peruano. La sala del Icpna acaba de abrir oficialmente sus puertas con la muestra tensiones generacionales curada por el crítico Alfonso Castrillón. Este bellísimo espacio, diseñado por el arquitecto Jorge Donilla, pone al servicio de los artistas no sólo una infraestructura moderna sino un equipo de curadores y críticos de primer nivel.
Si en quince años un artista no se renueva, es porque no tiene nada más que decir. Esta es la tesis de Alfonso Castrillón, crítico de arte y curador de una importante muestra —tanto por su carácter didáctico como informativo— titulada Tensiones generacionales, con que la nueva galería del Icpna de Miraflores ha decidido abrir oficialmente sus puertas. Castrillón construye su sistema de pensamiento sobre el de Ortega y Gas set. Ortega se basa en dos postulados: que el hombre llega a la madurez a los treinta años, más o menos, y que las generaciones se relevan cada quince. Como se tiene que partir de algún punto para ubicar los grupos generacionales, Ortega recomienda buscar en un momento crucial de la historia donde se advierta un cambio de la sensibilidad vital y encontrar el epónimo que la represente. Una vez hallado el hombre y averiguada la fecha de su nacimiento, se le suman treinta años, que es la edad en que, se supone, está en plena madurez. El resultado es la fecha de la generación de ese hombre y de sus coetáneos. La vigencia de una generación dura quince años, por tanto, pertenecen a la misma generación quienes nacen siete años antes o siete años después de la fecha base. Aclarada esta premisa, Castrillón presenta un esbozo de las generaciones de artistas e intelectuales del siglo XX. A los nacidos entre 1907 y 1920 los ubica en la generación del 37 o de los independientes. Están entre otros, Grau, Camino Brent, y Humareda. Luego viene la generación del 51 o de la abstracción que reúne a los nacidos entre 1921 y 1934: Eielson, Piqueras, Roca Rey, Rodríguez Larraín, Shinki, Delfín, Molí, Oliva y Tsuchiya. En la generación del 68 están Lee, Chávez, Navarrete, Mutal, Revilla, Vértiz, Tola, Hastings, Vainstein, Liona, Palao, Pastorelli, Cabieses y Di Malio. En la generación del 79 van Yaker, Checa, Wiesse, Polanco, Hamann, Pazos, Agois, Williams, Castilla Bambarén, Quijano, Rodrigo, Letts, Romero, Canziani y de Losada. Y en la generación del 93, García Zapatero, Pacheco, Mulánovich, Orejuela, Di Giovanni Mantilla, y Salem.
“La ubicación de las piezas ha sido sumamente delicada”, dice Pedro Pablo Alayza, subdirector del Icpna. “Hemos intentado crear diálogos silenciosos entre las obras de algunos artistas, y en el caso de los escultores, que casi siempre se quejan de estar mal ubicados, hemos cuidados especialmente la iluminación”. La galería está abierta de martes a domingo de 11 am a 8pm, y recibe un promedio de 150 visitantes diarios. Será destinada a exposiciones de arte contemporáneo y a algunas muestras de arte antropológico y etnográfico.
REVISTA SOMOS ,EL COMERCIO PERU
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